¡Oh!, San Evaristo, vos, sois el hijo del Dios de la vida,
su amado santo, Papa y Mártir, que, en Roma, y estimado
por vuestros fieles a los cuales os entregaseis por
completo, mostrando a Jesucristo, Dios y Señor Nuestro
tal cual era. Como conocedor fiel de la Sagrada Escritura,
la trasmitísteis con talento esmerado y humildad a vuestra grey.
Muerto el Papa Anacleto, sucesor de Clemente, la atención
se fijó en vos que habiais desarrollado un gran trabajo,
pero, os resististeis a asumir tan alta dignidad de Papa.
Ya, en la silla de Pedro, atendisteis las necesidades de vuestro
rebaño, la fe defendiendo contra la de los gnósticos.
A vos, se os reconoce, el establecido haber, las normas
para la consagración y trabajo pastoral de Obispos y diáconos,
pues, mandasteis celebrar públicamente los matrimonios,
ocupándoos de la vida de vuestros fieles a cada nada.
Nunca os descuidasteis de los fieles del África y de Egipto,
a quienes, les escribisteis sendas cartas de amor y de fe llenas.
Y, así, un día, en el tiempo, entregasteis vuestra vida a Dios,
hecho mártir, para coronada ser de luz, como premio justo
a vuestra obra increíble llena de amor y de fe. ¡Alelluya!
¡oh!, San Evaristo, “vivo mártir del Amor del Dios de la Vida”.
© 2018 by Luis Ernesto Chacón Delgado
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su amado santo, Papa y Mártir, que, en Roma, y estimado
por vuestros fieles a los cuales os entregaseis por
completo, mostrando a Jesucristo, Dios y Señor Nuestro
tal cual era. Como conocedor fiel de la Sagrada Escritura,
la trasmitísteis con talento esmerado y humildad a vuestra grey.
Muerto el Papa Anacleto, sucesor de Clemente, la atención
se fijó en vos que habiais desarrollado un gran trabajo,
pero, os resististeis a asumir tan alta dignidad de Papa.
Ya, en la silla de Pedro, atendisteis las necesidades de vuestro
rebaño, la fe defendiendo contra la de los gnósticos.
A vos, se os reconoce, el establecido haber, las normas
para la consagración y trabajo pastoral de Obispos y diáconos,
pues, mandasteis celebrar públicamente los matrimonios,
ocupándoos de la vida de vuestros fieles a cada nada.
Nunca os descuidasteis de los fieles del África y de Egipto,
a quienes, les escribisteis sendas cartas de amor y de fe llenas.
Y, así, un día, en el tiempo, entregasteis vuestra vida a Dios,
hecho mártir, para coronada ser de luz, como premio justo
a vuestra obra increíble llena de amor y de fe. ¡Alelluya!
¡oh!, San Evaristo, “vivo mártir del Amor del Dios de la Vida”.
© 2018 by Luis Ernesto Chacón Delgado
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27 de Octubre
San Evaristo
5to Papa y Mártir
Nació por los años 60, de una familia judía asentada en tierras
griegas. Recibió educación judía y aprendió en los liceos helénicos.
No se conocen datos de su conversión al cristianismo, pero se le ve
ya en Roma como uno de los presbíteros muy estimados por los fieles que,
lleno de celo, eleva el nivel de la comunidad de cristianos de la
ciudad, entregándose por completo a mostrarle a Jesucristo. Amplio
conocedor de la Sagrada Escritura, es docto en la predicación y humilde
en el servicio.
Muerto mártir el Papa Anacleto, sucesor de Clemente, la atención se
fija en Evaristo. Por humildad se resistió con todas las fuerzas
posibles a asumir la dignidad que comportaba tan alto servicio. El día
27 de Julio del año 108 tuvo la Iglesia por Papa a Evaristo.
Atendió cuidadosamente las necesidades del rebaño: Defiende la
verdadera fe contra los errores gnósticos. Establece normas que afectan a
la consagración y trabajo pastoral de los Obispos y de los diáconos.
Manda la celebración pública de los matrimonios. Se ocupa de la vida de
los fieles, esbozándose ya una cierta administración territorial, para
su mejor atención y gobierno. También escribió cartas a los fieles de
Africa y de Egipto.
Murió mártir, siendo Trajano emperador, hacia el 117.
La iglesia del tiempo cada día crece en número, pero está perseguida
por las leyes; es silenciosa y fuerte en la fe, oculta y limpia en las
obras; vive dentro del Imperio en estado latente, desplegando poco a
poco su potencialidad al soplo del Espíritu Santo.