28 de Marzo
Jueves Santo
Se sucede el jueves antes del Domingo de Resurrección. Es el primer día del Triduo Pascual.Este día se rememora la última cena de Jesús con los doce apóstoles.
Este es el primer día del año litúrgico, así pues para la religión cristiana es el día de Año nuevo en cuanto a los oficios religiosos se refiere. Se celebra un funeral por el Cristo muerto y la Primera Misa del Año.
El Jueves Santo es junto con el Corpus Cristi y la Ascensión, el primero de los Tres Jueves del año más importantes en la religión católica. Al ser una fiesta de marcado carácter religioso no podemos dejar de mencionar sus peculiaridades en este aspecto. Es el día en que se celebra la última Cena en que Cristo instituyó la Eucaristía. También se escenifica el Lavatorio de los pies (sobre esto versa el Evangelio). Los pasos y procesiones se vuelcan en estas significaciones y empiezan a avanzar, ya en la noche, el misterio del Viernes Santo.
El Jueves Santo tiene una celebración muy sobrecogedora y peculiar que se denomina el OFICIO DE TINIEBLAS, en la noche, después de apagar las luces, se van apagando paulatinamente todas las velas hasta dejar toda la iglesia a oscuras. Y así, en plena oscuridad, y sin acompañamiento de órgano, se canta el bellísimo Christus factus est. En realidad es un funeral por el Cristo muerto.
La misa de este día, que al ser conmemorativa de la última cena del Señor se celebra entre las 7 y las 8 de la tarde, tiene de especial, que en la lógica litúrgica es la PRIMERA MISA del año. De hecho las misas de todos los domingos lo que hacen es reproducir esta última cena a lo largo de todo el año. Por eso, sin tener nada distinto de la misa de cualquier domingo, se le da una especial solemnidad, como dando a entender que los demás días del año se repite la Consagración del Cuerpo y de la Sangre de Cristo.
Las lecturas de el Evangelio que se hacen en este día hacen referencia al lavatorio de los pies que precedió a la santa cena; un acto que destaca como muestra del amor fraterno empezando por los más necesitados. Y que el sacerdote que oficia la misa de este día vuelve a representar, lavando los pies a los demás sacerdotes en señal de humildad, mucha gente acude a ver esta escenificación muy típica de este día.
Después del lavatorio viene la gran solemnidad eucarística.Tras la consagración se lleva la Eucaristía al altar secundario que ha sido adornado como “monumento”, sirviéndose especialmente de las palmas del Domingo de Ramos, que los fieles prestan para este fin.
La noche de este día estará plagada de vigilias de los fieles a sus imágenes más veneradas, y las procesiones que salgan al paso lo harán hasta bien entrada la madrugada.
En muchas poblaciones donde los Monumentos a la Eucaristía alcanzan un valor estético extraordinario, los fieles dedican esta noche y la mañana del Viernes a visitar las iglesias de la ciudad para admirarlos y orar un rato ante ellos. La Sagrada forma que en esta celebración se consagra es la que luego queda expuesta a lo largo del año en el altar.
En las calles hay mucho bullicio porque comienzan los días grandes de la Semana Santa, conocidos como el Triduo Pascual, a partir de hoy ya es día festivo a nivel nacional, así pues, el número de gente que se congregue para celebrar las procesiones será sensiblemente mayor.Las procesiones se celebran hasta muy entrada la madrugada.
Una de las tradiciones típicas de este día, cuyo origen no está muy claro ya que muchos lo achacan a una costumbre pagana, es la de regalar a los niños huevitos de chocolate con pequeños regalos dentro.
Esta costumbre tiene su origen en las costumbres católicas, aunque parezca una costumbre extranjera…Durante mucho tiempo estuvo prohibido comer carne y huevos en Cuaresma. Por eso, el día de Pascua, el Jueves Santo, que marca el final de la Cuaresma, la gente corría a coger gran cantidad de ellos, para comerlos en familia y distribuirlos como regalo.
Al contrario de lo que se podría imaginar la tradición de los huevos de Pascua que hoy se regalan a los niños no es una tradición pagana, sino que tiene sus orígenes en la religión cristiana.
Durante la Edad Media, en Semana Santa, era común que los censos feudales se pagaran con huevos. Por lo que se estipuló que el día de pago fuese el domingo de Pascua.
Es entonces cuando a principios el siglo XIX, en Alemania, Italia y Francia, aparecieron los primeros huevos hechos con chocolate, que se comenzaron a regalar conmemorando estas costumbres tan antiguas.
En algunos países es celebrado por miles de niños con tradiciones como la búsqueda de los huevitos, como símbolo de esperanza y renacimiento de las personas.
En España en concreto, se regalan los huevitos a los niños, en zonas como Cataluña los padrinos regalan a sus ahijados las llamadas Monas de Pascua, que van desde la verdadera mona de Pascua que es un bizcocho adornado con huevos cocidos, hasta diversas figuras y huevos de chocolate.