del Dios de la vida, sus amados santos y mártires y,
que, san Dámaso, Papa, dice de vosotros que erais dos
jóvenes que os habían enrolado en el ejército y que,
arrastrados por el miedo, estaban dispuestos a obedecer
las órdenes de un magistrado impío, pero que, después
de convertirse al Dios verdadero dejasteis el ejército,
arrojando vuestros escudos, armas y uniformes, y, que,
rebosantes de vuestro triunfo como confesores de Cristo,
entregasteis vuestras santas vidas, en su honor y gloria.
Vosotros estabais, al servicio de Flavia Domitila, señora
de alcurnia de Roma. Eusebio, dice que ella, sobrina
era, del Emperador Domiciano y que el mismo, la envió
al destierro, porque ella se había declarado cristiana,
y con ella, fueron al destierro San Nereo y San Aquileo,
porque vosotros proclamasteis vuestra fe, en Cristo Jesús.
San Jerónimo, dice que vuestro martirio, fue cruel y
largo que os sirvió de martirio. Pasó el tiempo, y otro
impío emperador mandó que os cortaran la cabeza y así
el honor tuvieron de derramar vuestra sangre por vuestra
fe. San Dámaso, papa, escribió la siguiente inscripción
en vuestras tumbas: “Nereo y Aquileo pertenecían al ejército
del emperador. Pero se negaron a cumplir ciertas órdenes
que a ellos les parecían crueles. Al convertirse al
cristianismo abandonaron toda violencia y prefirieron
tener que abandonar el ejército antes que ser crueles
con los demás. Proclamaron su amor a Cristo en esta tierra
y ahora gozan de la amistad de Cristo en la eternidad”.
Y, así, vosotros, que, renunciando a servir a mortales
hombres, elegisteis poneros al servicio del Señor, que
Inmortal, como es; Él, os acogió en su Reino de plena
luz inconmensurable, donde ahora moráis eternamente,
como justo premio a vuestro amor incesante y porque
sabíais que, sin cruz, redención no hay, ¡no la hay!;
!Oh!, Santos Nereo y Aquileo, “vivas luces del Dios vivo”.
© 2016 by Luis Ernesto Chacón Delgado
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12 de Mayo
Santos Nereo y Aquileo
Mártires
Martirologio Romano: Santos Nereo y Aquileo, mártires, los
cuales, según refiere el papa san Dámaso, eran dos jóvenes que se habían
enrolado en el ejército y que, arrastrados por el miedo, estaban
dispuestos a obedecer las órdenes impías del magistrado, pero después de
convertirse al Dios verdadero dejaron el ejército, arrojando sus
escudos, armas y uniformes, contentos de su triunfo como confesores de
Cristo. Sus cuerpos fueron sepultados en este día en el cementerio de
Domitila, situado en la vía Ardeatina de Roma (s. III ex.).
Etimológicamente: Nereo = Aquel que domina el mar, es de origen griego.
Etimológicamente: Aquileo = Aquel que lucha sin espada, es de origen griego.
Breve Biografía
Estos dos personajes estaban al servicio de Flavia Domitila , una de las primeras señoras de Roma.
El historiador Eusebio dice que esta noble dama era sobrina del
Emperador Domiciano y que el tal mandatario la envió al destierro,
porque ella se había declarado seguidora de Jesucristo.
Con Domitila fueron enviados también al destierro San Nereo y San Aquileo, porque proclamaban su fe en el Divino Redentor.
Afirma San Jerónimo que el destierro fue tan cruel y tan largo que les sirvió de martirio.
Después otro emperador mandó que les cortaran la cabeza y así tuvieron el honor de derramar su sangre por proclamar su fe.
El Papa San Dámaso escribió la siguiente inscripción en la tumba de
estos dos mártires: “Nereo y Aquileo pertenecían al ejército del
emperador. Pero se negaron a cumplir ciertas órdenes que a ellos les
parecían crueles.
Al convertirse al cristianismo abandonaron toda violencia y
prefirieron tener que abandonar el ejército antes que ser crueles con
los demás. Proclamaron su amor a Cristo en esta tierra y ahora gozan de
la amistad de Cristo en la eternidad”.
El bajo relieve que representa a San Aquileo al ser golpeado por el
verdugo, se considera como la más antigua representación que se ha
encontrado, acerca del martirio de un cristiano.