"Yo estaré con vosotros hasta
el final de los tiempos”. Así,
dijisteis Señor, Dios de la vida,
antes de que ascendieseis al
Padre, glorificado de luz.
el final de los tiempos”. Así,
dijisteis Señor, Dios de la vida,
antes de que ascendieseis al
Padre, glorificado de luz.
"Hombres de Galilea, ¿qué hacen
ahí mirando al cielo? Este que
ha sido llevado, este mismo Jesús,
vendrá como lo han visto subir
al cielo” Dijeron vuestros ángles.Y, duda alguna no queda, pues
Vos, sois verdadera comida y
verdadera bebida. Luz eterna
que alumbra desde siempre y
Amor insondable sin término.
Permitidnos, pues Amadísimo
Señor, alados ser junto a Vos,
y, al final de los tiempos,
por nuestras obras, con Vos,
vivir, la eternidad de la vida.
¡Gloria al Padre!
¡Gloria al Hijo!
¡Gloria al Espíritu Santo!
¡Oh! Trinidad Santa
Un solo Dios, por los
Siglos de los siglos
Amén.
© 2015 by Luis Ernesto Chacón Delgado
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20 de Mayo
Solemnidad de la Ascensión del Señor
Cuarenta días después de la Resurrección, la Palabra de Dios describe
cómo Jesús se despide físicamente de sus discípulos, dándoles las
últimas instrucciones:
“Y les dijo: – Vayan por todo el mundo y anuncien la Buena Nueva a
toda la creación. El que crea y se bautice se salvará. El que se resista
a creer se condenará. Y estas señales acompañarán a los que crean en mi
Nombre: echarán los espíritus malos, hablarán en nuevas lenguas,
tomarán con sus manos las serpientes y si beben algún veneno no les hará
ningún daño. Pondrán las manos sobre los enfermos y los sanarán- Así
pues, el Señor Jesús, después de hablar con ellos, fue llevado al cielo y
se sentó a la derecha de Dios”
(Mc 16, 15-19; cfr. Lc 24, 50-51).
Mientras miraban fijamente al cielo hacia donde iba Jesús, se les
aparecieron dos hombres vestidos de blanco que les dijeron: Hombres de
Galilea, ¿qué hacen ahí mirando al cielo? Este que ha sido llevado, este
mismo Jesús, vendrá como lo han visto subir al cielo”. (Hch 1, 3-11)
Celebración
Celebramos la Ascensión del Señor, es el domingo anterior a la fiesta
de Pentecostés, son solemnidades muy importantes de la Iglesia, nos
hablan de nuestro destino final: ir al Padre como Jesús y de la
fundación y misión de nuestra Iglesia Católica. Se usa el color blanco,
tanto en el altar como en las vestiduras del sacerdote.
Significado de la expresión
Los evangelistas describen al final de los evangelios y al principio
del libro de los Hechos de los Apóstoles, que Jesús “fue elevado al
cielo”, por lo que los cristianos repetimos en nuestro Credo:
“Subió al cielo y está sentado a la derecha del Padre”. Esta
afirmación es un modo de hablar para decir que Jesús se fue al Padre,
llevando consigo su naturaleza humana. La ida de Jesús al Padre
constituyó nuestro cielo.
Jesús, al ir al Padre, no entra en un lugar, sino en una nueva
dimensión, en donde no tienen sentido nuestras expresiones: arriba,
abajo, subir, bajar… Ir al cielo significa, ir a Dios. En el cielo,
iremos a unirnos al cuerpo de Cristo resucitado todos los que aceptamos
su salvación.
Significado de la fiesta en la iglesia
Según la narración de San Lucas, la Iglesia celebra la Ascensión del
Señor a los cuarenta días de su resurrección. Esta fiesta está dentro
del tiempo pascual que consta de cincuenta días y concluye con la Venida
del Espíritu Santo sobre la Iglesia. (Cf. Lc 24, 49-53; Hch 1, 3-11; 2,
1-41) La fiesta de la Ascensión no nos habla de un alejamiento de
Cristo, sino de su glorificación en el Padre. Su cuerpo humano adquiere
la gloria y las propiedades de Dios antes de encarnarse. Con la
Ascensión, Cristo se ha acercado más a nosotros, con la misma cercanía
de Dios. Es también una fiesta de esperanza, pues con Cristo una parte,
la primicia de nuestra humanidad, está con Dios. Con él, todos nosotros
hemos subido al Padre en la esperanza y en la promesa.
En la Ascensión celebramos la subida de Cristo al Padre y nuestra
futura ascensión con él. Al celebrar el misterio de la Ascensión del
Señor, recuerda que EL CIELO ES NUESTRA META y que la vida terrena es el
camino para conseguirla.